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Badana:
Cuero curtido.
Baldío:
Se dice del terreno que se ha dejado sin labrar.
Baño:
Recipiente generalmente de barro. También el de latón que se usaba para llevar la ropa.
Basquiña:
Saya, generalmente negra, que ponían las mujeres sobre la ropa interior.
Bardino:
Un color. Se solía aplicar a ciertos gatos.
Barrena:
Barra larga de hierro con uno o los dos extremos cortantes.
Barreño:
Sinónimo de baño.
Barriliche:
Botijo.
Barro blanco:
Arcilla blanca o caolín. Con él se blanqueaban (encalaban) las paredes interiores de las casas.
Bayones:
Plantas silvestres. Se denominan en otros lugares aneas y espadañas.
Besana:
Labor de surcos paralelos que se hacía con el arado
Berraza:
Planta silvestre parecida al berro
Berreculo:
Planta silvestre de sabor ácido que se usa en ensaladas.
Bimar:
Binar, arar por segunda vez.
Bocana:
Abertura grande sin puerta que hay en las tenadas y que generalmente daba a un corral.
Bordiar:
Bordear
Borra:
Excremento líquido de ciertos animales.
Borrarse:
Defecar borra los animales.
Borrajo:
Rescoldo, brasa bajo la ceniza.
Bramante:
Hilo gordo y resistente.
Brecha:
Herida, y en especial la producida en la cabeza.
Bruces (de):
Caído boca abajo.
Brugo:
Restos de las uvas después de pisadas.
Bruño:
Ciruela silvestre.
Bubilla:
Abubilla. Pájaro autóctono
Buche:
1. Biche, pollino.
2. Estómago.
Bujaca:
Agalla de algunos árboles. Algunas gentes consideran como fruto lo que en realidad no es otra cosa que una excrecencia que elaboran ciertos árboles como defensa contra las picaduras de insectos. Son muy ricas en tanino y, por ello antiguamente en muchos lugares se recogían por ser muy útiles, principalmente para el curtido de pieles.
Bujaco:
De similares características que la bujaca, pero de tamaño menor. En nuestro pueblo hubo épocas en las que los niños los usábamos como sustitutos de bolas y canicas en un juego infantil.
Bufarda:
Golpe impetuoso y ocasional de viento.
Buquerón:
Boquerón y en espacial el de los pajares.